Conoce a la artesana osornina que plasma sus innovadoras ideas en el ámbar chileno

Sandra Zimmermann quiere dar a conocer el valor milenario del Picoyo a través de Yo Patagonia.

En unas vacaciones recorriendo la cordillera en la novena región, Sandra Elisabeth Zimmermann conoció por primera vez el Picoyo, una resina de araucaria semi cristalizada que se puede encontrar en la unión entre las rama y el tronco del árbol y que es comparada por su color y sutileza con el ámbar. 

Tras este primer acercamiento la osornina quedó flechada por tan elegante y milenario material y desde ese mismo instante comenzó a emplearlo para fabricar sus productos artesanales bajo su emprendimiento Yo Patagonia. 

“Fue amor a primera vista, como decimos. Encontré en este material algo único, no conocido y de gran valor, así que de a poco y con mucha paciencia aprendí a trabajarlo”, relata la artesana a Diario Emprende.  

De forma autónoma y motivada por aprender y dar a conocer al mundo el valor milenario del Picoyo, la emprendedora y madre de dos hijos, elaboró en primera instancia piezas de decoración, como lámparas y  porta vasos, para luego trasladarse a la joyería en donde destacan sus accesorios como aros y colgantes.

Un trabajo único de mano de la artesana osornina que siempre espera entregar un poco de ella en cada joya y decoración que fabrica.

"Ha sido fundamental creer que siempre lo que trabajo es único y a darle el valor que corresponde. Tratando de elaborar con exclusividad y presentación a un buen nivel", destaca la emprendedora.

Valor milenario 

El anhelo de Sandra Zimmermann es poder dar a conocer la belleza de este producto milenario, una meta que busca alcanzar gracias a su emprendimiento, Yo Patagonia el cual va creciendo más y más gracias al esfuerzo de la artesana y la ayuda que le han entregado.

En este sentido Zimmermann, destaca a Diario Emprende que uno los grandes hitos que la impulsó a continuar desarrollando esta iniciativa fue gracias a proyectos de Sercotec y el apoyo fundamental de sus cercanos.

“Ingresar a Sercotec y haberme ganado un proyecto con lo cual pude comprar maquinaria apropiada para trabajar fue fundamental. Además el apoyo de Rosa Villalobos a quien conocí en el centro de negocios de Sercotec, fue quien me instó a trabajar en joyería”, comenta la artesana.

La osornina espera poder seguir consolidando su negocio tanto en la Región de Los Lagos como en todas partes del mundo, dando a conocer los grandes atributos del Picoyo Chileno.

Si quieres conocer más sobre el trabajo que realiza Sandra, puedes revisar este enlace.