Cerveza Totoral: El paso desde la lechería a una Barley Wine a orillas del Llanquihue

Pedro Contreras cuenta cómo logró convertir su pasatiempo en un negocio exitoso.

Después de una vida ligado a la industria láctea en los campos sureños, para Pedro Contreras llegó el momento de cambiar de rubro, eso sí manteniéndose fiel a su estilo: entusiasmo, estudio y constancia para pasar de la leche a la cerveza, una apuesta que a los pocos años ha llevado ya el nombre del lago Llanquihue a subir como la espuma en los certámenes cerveceros internacionales. 

Sin ir más lejos, en la última competencia mundial de este preciado brebaje, celebrada en Inglaterra a principios de Octubre, la cerveza de Contreras obtuvo medalla de oro, superando a competidores de todo el mundo gracias a probar con una nueva variedad de consistente sabor y alta graduación".

Muerte súbita

“Había muchas personas que me preguntaban si teníamos una cerveza algo más fuerte, así es que me puse a estudiar qué tipos de cerveza había con un cierto grado de alcohol, entre 8 y 12 grados, y me encontré con una que se llama Barley Wine en Europa, y dije voy a apuntar a hacer una cerveza de este estilo, obviamente con mi propia receta e ingredientes, después de haber estudiado mucho. Empecé a hacer mis pruebas y ensayos, y llegué a mi propia Barley Wine a la que bauticé como Muerte Súbita”, explica el maestro cervecero.

Felices con este reconocimiento a nivel global, la mirada en la cervecera Totoral seguirá teniendo un foco en lo local y en las virtudes del territorio, apostando con esto, más que a masificar las ventas, por generar un polo de atracción turística basado en paisajes, buena gastronomía y la mejor cerveza del mundo, tal como detalla Álvaro Contreras, gerente de la empresa: “Conocer, probar, experimentar, disfrutar de la cerveza frente al volcán Osorno, mirando el lago Llanquihue, que a cualquier persona este lugar la pueda acoger, y mostrarle las maravillas, tanto de la zona, como de poder experimentar tomarte la mejor cerveza del mundo en el lugar donde se produce”.

De pasatiempo a negocio

Mantener la calidad y apuntar por entregar la mejor experiencia al visitante serán las claves en esta nueva etapa para la cervecería y para el maestro Pedro Contreras, un viaje personal y familiar que comenzó como un pasatiempo, y que recibe ahora la atención de todo el mundo sin perder la pasión.

En ese sentido, el maestro cervecero explica: “Lo que uno emprende, tiene que colocarle pasión, mucho estudio, hacer lo que a uno le gusta. A mí me gustaba mucho el tema de procesos, de calidad, el objetivo justamente es ese. Cuando yo estaba solamente con cerveza Loco Patrón, y ahora con cerveza 860, el objetivo de mis socios y mío también es, si ya estábamos metidos en la cerveza, apuntar a hacer la mejor cerveza de la cuenca del lago. Ese es nuestro objetivo, y creo que lo estamos logrando, porque estamos avalados por las medallas internacionales que estamos sacando”.

Más allá de los premios y proyecciones, cervecera Totoral sigue produciendo a pequeña escala y cuidando el detalle en cada botella, que luego parte desde Llanquihue a las mesas y puntos de venta en Puerto Varas y otras localidades cercanas. La apuesta para este verano es convertirse en visita obligada para los miles de turistas que se espera lleguen hasta la zona lacustre.